El Hambre ya estaba ahí
La crisis ha puesto al descubierto la fragilidad de nuestro modelo de desarrollo y ha sacado a la luz que algo tan esencial como una comida adecuada no está al alcance de todo el mundo. Ya en marzo, al comenzar el confinamiento, se pusieron de manifiesto alguna situaciones críticas en el estado de alarma: menores con beca comedor que al cerrar los colegios quedaban sin esa SU comida diaria caliente y nutritiva, los bancos de alimentos en situación complicada porque sus volutanrixs son sobre todo personas mayores que de pronto no podían salir de casa, inmigrantes sin papeles y sin ingresos sin poder realizar actividad alguna, o mayores sin atención, aisladxs en sus hogares.
El COVID19 no ha hecho sino agudizar los problemas de quienes ya estaban mal y ha alcanzado a nuevos grupos sociales. Las estimaciones del Banco de Alimentos apuntan a que estimó que han aumentado al menos un 30% las peticiones de demanda de ayuda